Eastman Kodak Co., declarada recientemente en quiebra, anunció que dejará de fabricar cámaras digitales, videocámaras y marcos de fotos digitales, a consecuencia de la crisis y la necesidad de ahorrar.
Sin embargo, la empresa conservará el nombre y otorgará licencias para el uso de la marca conocida mundialmente y continuará con su negocio tradicional de papel fotográfico y películas analógicas, el cual sigue siendo rentable, aunque cada vez menos.
Tras registrar enormes pérdidas, Kodak se declaró en bancarrota en enero pasado e intenta recuperarse partiendo de cero, reinventándose como especialista en impresión de fotos. El abandono del negocio con cámaras digitales es “el paso lógico en ese cambio”, señaló el presidente Pradeep Jotwani.
Pese a su actual situación financiera, la firma pionera en fotografía aseguró todos los servicios y garantías de sus aparatos.
La llegada de la fotografía digital hizo caer los ingresos del negocio de la fotografía analógica. Kodak fue incluso pionero en las nuevas técnicas, pero después perdió fuerza ante la entrada de firmas coreanas y japonesas.
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